No sea que se me olviden. Comentar que reciéntemente nos han provisto de una almohadilla (eso que está entre el auricular y tu oreja) a cada uno de una vez, por temas de higiene, ya era hora... El problema es que ya nos hemos acostumbrado a no estar preocupándonos por ellas y claro, al irnos se nos olvidan. Pero no pasaba nada, llegabas y te daban otra.
Ahora se han gastado las reservas, y ya se empiezan a dar casos de gente que no ha podido ponérsela (por dejársela en casa) y tener que ponerse el casco diréctamente a pelo en la oreja. ¿Tan dificil sería poner unas taquillas personales?.
Otra cosa, está entrando más gente nueva, entran más llamadas pero sin embargo tenemos más cola de llamadas, yo hay cosas que no entiendo... Vaya desorganización!, si nos meten más llamadas desde Telefónica, que lo hagan escaladamente, que los nuevos no cuentan como uno entero y rindiendo, cojones.
Ahora que ya estoy más situado empiezo a ver algunas cosas que no entendía más claras. Había (y hay) algun que otro coordinador (o coordinadora, a saber) que dejaban bastante que desear, y sin embargo, entre el tiempo que estuve de escucha y en lo que he observado estos días, veo operadores que le dan muchas vueltas en conocimientos a algunos coordinadores, pero parece ser que mientras que algunos son elegidos a dedo para ascender, otros parecen condenados a estar ante el teléfono de por vida (o hasta que se canse), a ver si me entero de por qué.
También pienso que los viejos nos excluyen a los nuevos, por ejemplo, hay algunas personas que se encargan de pedir cena de una tienda de estas de comidas a domicilio, pero a mi nunca me han preguntado, ni a ninguno de mi curso. Ni que decir tiene que a los que acaban de entrar, menos aun. En fin, siempre habrá escalas, supongo.